Estudio de UPenn revela que el plan republicano para reducir la inmigración disminuirá el PIB de Estados Unidos
Un nuevo estudio de la Wharton School de la Universidad de Pensilvania muestra que el plan republicano de reducir la inmigración a la mitad disminuirá el producto interno bruto per cápita de EE. UU. en un 0.7 por ciento durante los próximos diez años, y en un 2 por ciento para 2040.
El estudio es una respuesta directa a la Ley RAISE, presentada por el senador de Arkansas Tom Cotton y el senador de Georgia David Perdue y respaldada por el presidente Trump, la cual propone reducir a la mitad la inmigración legal total y hacer hincapié en los trabajadores altamente cualificados (para más información sobre este proyecto de ley, consulte nuestra cobertura anterior aquí). El presidente y otros republicanos creen que esto creará oportunidades de empleo para los ciudadanos estadounidenses y ayudará a construir la economía en general.
Sin embargo, el estudio de Wharton llega a la conclusión opuesta. Kimberly Burham, economista y directora gerente del Penn Wharton Budget Model, afirma que «a largo plazo, si se reduce el nivel de inmigración en combinación con el aumento de la proporción de inmigrantes altamente cualificados, el PIB seguirá disminuyendo».
Según lo informado en este estudio y en NBC News, existen múltiples razones por las que la inmigración ayuda al crecimiento de la economía estadounidense. En primer lugar, como señala Burham, «es una combinación de más personas comprando y un aumento del tamaño del mercado. . . . También se trata de que más personas crean una mayor reserva de ahorros e inversiones que pueden generar crecimiento económico a largo plazo». Así, como alternativa, una población en disminución reduce la economía en general. Como lo expresó Mark Zandi, economista jefe de Moody’s, «más inmigrantes van a comprar más».
En segundo lugar, a medida que un gran número de la generación del 'baby boom' se jubila y crea enormes vacantes de empleo, los inmigrantes cubren esas vacantes. Como señala además NBC News, la represión migratoria que ya está en marcha está afectando la capacidad de muchos empleadores para encontrar candidatos cualificados; en otras palabras, la oferta no satisface la demanda.
Finalmente, la inmigración de mano de obra poco cualificada en realidad ayuda a mantener bajos los costos para el consumidor, lo que beneficia a los estadounidenses de bajos ingresos y permite un mayor gasto. Si bien es cierto que la competencia en el lugar de trabajo puede reducir los salarios en ciertas áreas de empleo, el profesor Harry Holzer de la Universidad de Georgetown señala, según lo informado por NBC, que la mano de obra inmigrante reduce tanto los costos de bienes y servicios como aumenta los ingresos fiscales, los cuales pueden destinarse a una amplia variedad de áreas necesarias.
Mientras universidades, empresas y políticos continúan opinando sobre diversos planes de inmigración que avanzan en el Congreso, el Blog de Inmigración de NMM seguirá proporcionando actualizaciones y análisis sobre los últimos acontecimientos.
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