El Debate sobre la Ciudadanía por Derecho de Nacimiento Genera Temor en los 128,000 Niños Ciudadanos Estadounidenses de Inmigrantes Indocumentados de Nueva Jersey
Con el presidente Trump amenazando con un enfrentamiento constitucional sobre la cuestión de la «ciudadanía por derecho de nacimiento», muchos inmigrantes de Nueva Jersey están preocupados por sus hijos: tanto los que ya nacieron y son considerados ciudadanos estadounidenses, como los que están por nacer. La «ciudadanía por derecho de nacimiento» es la concesión automática de la ciudadanía estadounidense a cualquier niño nacido en suelo estadounidense, sin importar la ciudadanía o el estatus de residencia de los padres. Citando un informe del Migration Policy Institute de 2016, New Jersey’s 101.5 escribió que «Nueva Jersey fue el hogar de 128,000 niños entre 2009 y 2013 que nacieron en los Estados Unidos de inmigrantes indocumentados. Esto representó el 76 por ciento de todos los hijos de inmigrantes que vivían ilegalmente en el estado.» Nueva Jersey ocupa el octavo lugar a nivel nacional con el mayor número de niños ciudadanos estadounidenses nacidos de inmigrantes indocumentados.
Si bien no se puede dudar de la capacidad del Presidente para firmar físicamente una orden ejecutiva que declare el fin de la ciudadanía por derecho de nacimiento, la cuestión de si este acto superaría los desafíos constitucionales por muchos motivos es un asunto completamente aparte, que se abordaría mejor en un artículo de revista jurídica que en un blog. Además, el proceso de enmendar la Constitución de EE. UU. para poner fin a la ciudadanía automática en virtud del nacimiento en suelo estadounidense no sería la tarea más fácil. No obstante, las palabras del Presidente han alarmado a los inmigrantes en todo Nueva Jersey.
La preocupación radica en lo desconocido y en las incertidumbres. Los padres inmigrantes indocumentados ya viven cada día con la anticipación de que los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas los arresten; ahora, también se preocupan por sus hijos. Como dijo una madre inmigrante del condado de Somerset con cuatro hijos ciudadanos estadounidenses: «Tengo que preocuparme de que mis cuatro hijos sean deportados conmigo. No sé qué voy a hacer. He tenido miedo por mí misma durante los últimos treinta años, ahora debo vivir con miedo por mis hijos el resto de mi vida.»