En medio de los despidos en el sector tecnológico, la demanda de visados H-1B alcanza nuevos máximos

En los últimos años, el programa de visados H-1B se ha convertido en un tema muy debatido. El programa, que permite a las empresas contratar a trabajadores extranjeros altamente cualificados, ha sido criticado por algunos por desplazar a trabajadores estadounidenses y contribuir al estancamiento salarial. Otros afirman que el programa es necesario para apoyar a muchas industrias estadounidenses. A pesar del reciente aumento de los despidos en el sector tecnológico, la demanda de visados H-1B ha alcanzado recientemente nuevos máximos.
¿Qué es el visado H-1B?
El visado H-1B es una categoría de visado temporal para no inmigrantes que permite a las empresas presentar peticiones en nombre de profesionales extranjeros altamente cualificados para trabajar en ocupaciones especializadas. Normalmente, los puestos requieren al menos una licenciatura. Por lo general, los puestos se encuentran en los campos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas ("STEM"). Esto aumenta la competitividad estadounidense en la economía mundial. De hecho, la administración Biden ha ampliado recientemente los campos de estudio que pueden acogerse al programa. El programa de visados H-1B es una herramienta esencial para las empresas estadounidenses, especialmente en el sector tecnológico, donde un porcentaje significativo de la mano de obra está formado por trabajadores nacidos en el extranjero. Datos recientes indican que "los inmigrantes representan casi una cuarta parte, el 23,1%, de todos los trabajadores del sector STEM" en Estados Unidos.
El visado H-1B permite a los empresarios estadounidenses cubrir puestos de trabajo de importancia crítica con trabajadores extranjeros. Aunque muchos detractores del visado H-1B afirman que limita las oportunidades de empleo de los trabajadores estadounidenses, sus defensores sugieren que los trabajadores H-1B ofrecen un apoyo fundamental a la economía de Estados Unidos. En los últimos años, el programa también se ha visto envuelto en la polémica debido a la elevada tasa de denegaciones. Estas denegaciones han dificultado a las empresas la contratación de trabajadores extranjeros. Sin embargo, la tasa de denegación ha caído en picado bajo la administración Biden.
La demanda de H-1B sigue siendo elevada a pesar de los despidos en el sector tecnológico
Según un reciente informe de Bloomberg Law, se espera que el número de visados H-1B para el próximo año fiscal alcance su tope de 85.000. El plazo de inscripción para el año fiscal 2024 ya está abierto y se cerrará el 17 de marzo de 2023. A pesar de un aumento significativo de los despidos, con empresas como Cisco, IBM y Salesforce anunciando recortes de plantilla, el interés por los visados H-1B sigue siendo fuerte. Esto se debe al bajo coste de inscripción y a la actual escasez de mano de obra con talento en determinados campos tecnológicos.
La pandemia de COVID-19 también contribuyó a la demanda de trabajadores H-1B. Muchas empresas han pasado a trabajar a distancia y buscan contratar trabajadores de cualquier parte del mundo. Esto ha abierto nuevas oportunidades para los trabajadores H-1B, que tal vez no puedan trasladarse a Estados Unidos.
Un programa de visados H-1B cada vez más politizado
A pesar de la continua demanda de trabajadores H-1B, el programa sigue siendo objeto de críticas. Los críticos sostienen que el programa permite a las empresas contratar a trabajadores extranjeros con salarios más bajos que los de los trabajadores estadounidenses. Esto, a su vez, reduce los salarios de todos los trabajadores del sector. Algunos han expresado su preocupación por la calidad de los trabajadores H-1B, alegando que muchos no están altamente cualificados, sino dispuestos a trabajar por salarios más bajos. Además, se han dado casos de trabajadores H-1B explotados por sus empleadores. Estos empleadores utilizan el estatus de visado de un empleado para evitar que abandonen o denuncien abusos en el lugar de trabajo.
En respuesta a estas preocupaciones, el gobierno de Estados Unidos ha tomado medidas para endurecer las regulaciones en torno al programa H-1B. En 2020, la administración Trump puso en marcha una serie de reformas destinadas a evitar el abuso del programa. Estas reformas también garantizan que solo se contraten trabajadores altamente cualificados. Sin embargo, las reformas fueron criticadas por ser demasiado restrictivas. Esto, a su vez, hizo más difícil para las empresas contratar a los trabajadores críticos.
La administración Biden no ha anunciado ningún cambio importante en el programa H-1B. Se espera que la administración Biden adopte un enfoque más indulgente que la anterior. Anteriormente, el Presidente Biden había expresado su apoyo al programa, argumentando que es necesario para garantizar que las empresas estadounidenses puedan competir a nivel mundial.
Aunque la pandemia del COVID-19 ha provocado importantes despidos en la industria tecnológica, la demanda de visados H-1B sigue siendo elevada. El programa sigue siendo controvertido, ya que algunos argumentan que perjudica a los trabajadores estadounidenses, mientras que otros sostienen que es necesario para cubrir puestos altamente especializados. Queda por ver cómo abordará la cuestión la administración Biden, pero es probable que el programa siga desempeñando un papel importante en la economía estadounidense en los próximos años.